¿Tu hijo necesita llevar aparato? Si es así, es posible que te preguntes cómo ayudarle a adaptarse a la ortodoncia y a llevarla con comodidad y confianza. En este artículo te damos algunos trucos y estrategias para motivar y apoyar a tu hijo durante el tratamiento de ortodoncia.

¿Qué beneficios tiene la ortodoncia infantil?

La ortodoncia infantil es un tratamiento dental que se encarga de corregir la posición de los dientes y las alteraciones de la mordida en los niños. La ortodoncia infantil puede mejorar la estética, la función y la salud bucal de los niños, así como prevenir problemas futuros.

Algunos de los beneficios de la ortodoncia infantil son:

• Mejorar la apariencia y la autoestima de los niños al tener una sonrisa más bonita y armoniosa.
• Facilitar la higiene bucal al evitar que los dientes estén apiñados o torcidos, lo que dificulta el cepillado y favorece la acumulación de placa bacteriana y sarro.
• Prevenir las caries y las enfermedades de las encías al mantener los dientes limpios y sanos.
• Evitar el desgaste prematuro de los dientes al corregir las maloclusiones que provocan una distribución desigual de las fuerzas masticatorias.
• Mejorar la función masticatoria, fonética y respiratoria al alinear los dientes y armonizar las arcadas dentarias con los huesos maxilares.
• Prevenir o reducir la necesidad de tratamientos más complejos y costosos en el futuro al intervenir precozmente sobre los problemas de crecimiento y desarrollo de los huesos faciales.

¿A qué edad se puede hacer la ortodoncia infantil?

La ortodoncia infantil se puede hacer a cualquier edad, siempre que haya un problema que lo justifique. Sin embargo, no todos los problemas se pueden tratar de la misma manera ni en el mismo momento. Por eso, es importante acudir al dentista u ortodoncista para que evalúe el caso de cada niño y determine el tipo y el momento más adecuado de tratamiento.

La Sociedad Española de Ortodoncia recomienda que la primera visita al ortodoncista se haga a los 6 años, cuando ya han erupcionado los primeros molares permanentes. A esta edad, se pueden detectar anomalías en el crecimiento de los huesos faciales o en la erupción de los dientes que pueden requerir una intervención temprana para evitar complicaciones posteriores.

La ortodoncia temprana o interceptiva se realiza entre los 6 y los 9 años, aprovechando que los huesos aún están en formación y son más moldeables. Su objetivo es guiar el desarrollo óseo y dental para crear espacio para los dientes permanentes, corregir hábitos perjudiciales como el chupete o el dedo, mejorar la respiración nasal y prevenir o minimizar las maloclusiones.

La ortodoncia convencional o correctiva se realiza entre los 10 y los 14 años, cuando ya han salido casi todos los dientes permanentes. Su objetivo es alinear los dientes y mejorar la mordida mediante aparatos fijos o removibles.

¿Qué tipos de aparatos de ortodoncia existen para los niños?

Existen diferentes tipos de aparatos de ortodoncia para los niños, según el problema a tratar y las preferencias del paciente. Los más comunes son:

• Aparatos removibles: son aparatos que se pueden quitar y poner fácilmente. Se usan para corregir problemas leves o moderados, como el apiñamiento, el espaciamiento o la mordida cruzada. También se usan para mantener el espacio de los dientes que se han caído prematuramente o para evitar que los dientes se muevan después del tratamiento. Los aparatos removibles pueden ser de plástico o de metal, y suelen llevar ganchos o resortes para ejercer presión sobre los dientes.
• Aparatos fijos: son aparatos que se cementan o se adhieren a los dientes y no se pueden quitar. Se usan para corregir problemas más severos o complejos, como la mordida abierta, la sobremordida o el prognatismo. Los aparatos fijos más conocidos son los brackets, que son piezas metálicas o de cerámica que se colocan en la parte frontal de los dientes y se unen con un alambre que se ajusta periódicamente. También existen otros tipos de aparatos fijos, como los arcos linguales, las bandas, los tubos o los resortes.
• Aparatos funcionales: son aparatos que se usan para modificar el crecimiento de los huesos maxilares y mejorar la relación entre ellos. Se usan en niños que aún están en fase de crecimiento y tienen problemas esqueléticos, como el retrognatismo o el prognatismo. Los aparatos funcionales pueden ser removibles o fijos, y suelen consistir en dos piezas que se colocan en el maxilar superior y el inferior y que ejercen una fuerza sobre ellos para estimular o frenar su crecimiento.
• Alineadores invisibles: son aparatos que se usan para alinear los dientes sin que se noten. Se trata de unas férulas transparentes y a medida que se cambian cada dos semanas y que ejercen una presión gradual sobre los dientes para moverlos a la posición deseada. Los alineadores invisibles son una opción estética y cómoda para los niños que no quieren llevar brackets, pero solo se pueden usar en casos sencillos o moderados y requieren una buena colaboración del paciente.

¿Cómo ayudar a tu hijo a adaptarse a la ortodoncia?

Llevar ortodoncia puede suponer un cambio importante para tu hijo, tanto a nivel físico como emocional. Por eso, es normal que al principio le cueste adaptarse y que tenga algunas molestias, dudas o miedos. Como padre o madre, puedes ayudarle a superar esta etapa con estos consejos:

• Explícale los beneficios de la ortodoncia: antes de empezar el tratamiento, habla con tu hijo y explícale por qué necesita llevar ortodoncia y qué beneficios tendrá para su salud y su estética. Hazle ver que es una inversión a largo plazo y que merece la pena el esfuerzo.
• Apóyale y motívale: durante el tratamiento, muestra tu apoyo y comprensión a tu hijo. Reconoce sus logros, elógiale por su colaboración y anímale a seguir las indicaciones del ortodoncista. También puedes premiarle por cada visita o cada cambio de aparato con algo que le guste o le haga ilusión.
• Ayúdale con la higiene: la higiene bucal es fundamental cuando se lleva ortodoncia, ya que hay más riesgo de acumular restos de comida y placa bacteriana entre los aparatos. Enséñale a tu hijo cómo cepillarse correctamente los dientes y los aparatos después de cada comida, usando un cepillo especial, hilo dental y enjuague bucal. También puedes comprarle productos específicos para la limpieza de la ortodoncia, como pastillas efervescentes o irrigadores bucales.
• Adapta su alimentación: algunos alimentos pueden dañar los aparatos de ortodoncia o dificultar su limpieza. Evita darle a tu hijo alimentos duros, pegajosos o ácidos, como frutos secos, caramelos, chicles, refrescos o zumos. Opta por alimentos blandos, cortados en trozos pequeños o cocinados, como frutas, verduras, carnes, pescados o lácteos.
• Alivia sus molestias: es normal que tu hijo sienta algunas molestias o dolor al principio del tratamiento o después de cada ajuste de los aparatos. Para aliviarlas, puedes darle algún analgésico suave, como paracetamol o ibuprofeno, aplicarle hielo o gel frío en la zona afectada

Para más información o cualquier pregunta no dude en consultarnos en info@clinicajorda.com, llamar al 962 27 52 34 o visitarnos en nuestra clínica dental Dr Jordá en Xativa, Frente a estación de RENFE, Av. Ausiàs March, 1, 1B (Edificio, 46800 Bienvenidos, Valencia).